Las razones permiten comparar cantidades sin hacer necesariamente referencia a un total.

La razón “p es a q” se puede anotar p : q, pero se debe tener claro que esto es solo notación y que no representa una división entre sus términos.

La razón p : q tiene asociado el número   , lo que representa qué fracción es p de q. Este número se conoce como el valor de la razón.

Al amplificar o simplificar una fracción, se obtiene una fracción igual a la original. El opuesto no siempre es cierto, esto es, si se tienen dos fracciones iguales, a veces no se puede obtener una de ellas amplificando o simplificando la otra.

Los términos de una razón p : q se pueden multiplicar por un mismo número entero distinto de cero, o bien, se pueden dividir por un factor en común y obtener una razón igual a la original.

Afirmar que el x% de una cantidad tiene cierta característica, corresponde a decir que por cada 100 partes, x de ellas la tienen. El porcentaje x% se asocia a la fracción con denominador 100,    y se puede interpretar como un operador que actúa sobre una cantidad. Esto es, el x% de A es    · A.

Las proporciones permiten resolver muchas situaciones de nuestra vida cotidiana en que se desea determinar una incógnita en el contexto de dos cantidades que varían proporcionalmente, es decir, manteniendo la razón entre ellas. Para esto es muy útil la propiedad fundamental de las proporciones, que establece:

a : b = c : d corresponde a a · d = b · c.